¿Dónde estan los casi 6.000.000 de parados?.

Desde hace tiempo me vengo preguntando precisamente por la cuestión del encabezamiento.

Y es que cuando, a los que dedicamos buena parte de las  horas del día y algunas de la noche a cuestiones solidarias.

A quienes por mor de estas cuestiones, casi cada día nos destrozamos las gargantas llamando a la movilización social en aras de poder defender los derechos básicos que nuestra Constitución nos garantiza.

Pues en la mayoría de estos casos, nos damos cuenta de que, además de ser pocos. Somos casi siempre los mismos.

Y esto, que no tendría nada de particular. Me llama la atención que entre los activistas confesos no se encuentran, en muchos de los casos, personas pertenecientes a grupos en riesgo como es el caso de los parados.

Y más concretamente dentro de los parados, los denominados parados de larga duración.

Es de ahí de donde me surge la duda acerca de. ¿A que dedican su tiempo diario?, aquellas personas que habiendo perdido su trabajo. Se les extinguió el subsidio y los ingresos de su unidad familiar viendo perjudicasas seriamente sus condiciones mínimas de sustento, tanto ellos como sus allegados.

Según el informe Caritas en estos momentos, en una situación análoga a la que describo anteriormente se encuentran al menos, 2,2 millones de personas

.

Según otros datos que en esta misma semana han salido a discusión en el Congreso de los diputados.

Serían más de 3,5 millones, las personas que sucumbirían ante la llamada pobreza energética.

Sean los unos, o los otros datos que nos acerquen a la realidad social.

Sigo pensando, que no aprecio la participación de este grupo social abundante en las acciones solidarias que tanto los grupos a los que pertenezco, como aquellos con los que me relaciono me cuentan y compartimos experiencias.

¿Porqué estas personas no están en la calle reivindicando; de forma coherente y pacífica, la aplicación de soluciones que le saquen de la Exclusión en la que se encuentran?.

Pues realmente no tengo una teoría sociológica que ampare mis afirmaciones anteriores.

Pero lo que sí que empiezo a tener claro es una tesis -aunque personal -, sustentada en mis experiencias de estos últimos años.

-Si por una parte las hipotecas están llegando a cotas máximas de impagados, ejecuciones, y consecuencia de lo anterior levantamientos -desahucios.

-Si además estamos comprobando que las prestaciones por desempleo, cada día convierten a simples parados en parados de larga duración.

Si todo lo anterior se está dando. Que alguien me explique, al menos estas dos cosas.

1.- Qué motivos les hacen falta a este colectivo de personas para salir de sus casas a reivindicar sus derechos.

2. -Que estarán haciendo cada día estas personas dentro de sus casas, sin trabajo ni ocupación.

La primera respuesta se nw viene a la mente es que claro, en situaciones de crisis cada cual se tendrá que buscar la vida por -donde pueda-;pero esto que justificaría la existencia de un 27% de economía sumergida.

Esto anterior no justifica que estos colectivos no sigan siendo visibles por qué; no hay economía sumergida para los 6 millones de parados.

La segunda cuestión que se me viene a la mente es que; a consecuencia

de la práctica invectiva masiva de los gobiernos y de los llamados mercados, con la colaboración necesaria de bastante de la prensa sumisa.

Se ha instalado, dentro de la ciudadanía una especie de miedo atávico, absurdo en sí mismo que parece aconsejarnos que; dada la que está cayendo mejor que no nos movamos a ver si se olvidan de nosotros.

Esto, que históricamente sabemos que no es cierto.

Dejando las distancias adecuadas, que existen y muchas.

Si lo relacionamos con el genocidio nazi hacia los judíos no por esconderse debajo de la manta pudieron evitar que llamaran a la puerta de su casa.

Insistiendo en qué diferencias existen y muchísimas. Creo que quizás es este miedo inoculado de de forma tan extraña y adecuada dentro de nuestros cerebros.

Es este miedo es que más allá de nuestras sensibilidades políticas, de nuestros derechos perdidos, de nuestros anhelos frustrados.

Más allá de todo lo anterior, nos han convertido en una generación de "guevon@s". Entendiendo por tal, aquellos adultos incapaces de defenderse por sí mismo ni en favor de los suyos. Incluso por causas de pura supervivencia.

Si alguien se queda en paro; se convierte posteriormente en parados de larga duración. Si pertenece a una familia en la que el resto de  personas se encuentran en una situación equivalente. Si acude a los servicios sociales de su ayuntamiento y le dicen que no tienen ni capacidad ni presupuesto para poder atender sus necesidades básicas.

Si le limitan el acceso a la sanidad mediante copafos,a la Justicia mediante las Tasas, le condicionan la educación de sus hijos y además la vida de sus padres por medio de la limitación de las pensiones.

Si además de eso cuando en el parlamento, en el órgano de soberanía de este nuestro país, se discute la necesidad de una moratoria en el corte de suministros básicos, mientras dure el invierno.

Y el gobierno energético de este país –gobierno real- responde a las horas, con una subida de las tarifas de la energía eléctrica en la tarifa de último recurso que supera el 10%.

-Qué ostias estás haciendo en tu casa.

-Quien esperas que solucione los problemas.

-Que te atemoriza.

Sabes; yo pienso que quien nada tiene, nada tendrá que perder.

En los últimos cuatro años nos han quitado derechos sociales que nos había costado a esta sociedad más de cuatro décadas conseguirlos.

Nadie va a sacarnos de esta crisis si no somos nosotros mismos. Cada uno de nosotros.

Mientras esto anterior no lo vayamos teniendo claro más allá de nuestra estupidez izquierda- derecha. Otros operadores se están tomando el tiempo que necesitan para que quizás, sólo quizás nunca más volvamos a estar como antes.

Si es lo que quieres para ti, para los tuyos y en general para la sociedad con la que te  relacionadas. Allá tú. Redíos.