Llevamos casi una quincena del mes de
enero.
Mientras nosotros seguimos intentando
llegar a acuerdos con hoteles y restaurantes de forma que no se pierda la mayor
parte de la comida ya elaborada.
Entre tanto, ningún ayuntamiento de
los de la comarca parece interesados en ofrecer su colaboración a esta idea
que; de entrada, parece no tener ninguna contraindicación.
Y pensando en esto se me ocurre que
esta despreocupación tiene, obligatoriamente que ser debida a alguna de estas
tres opciones.
1º.- Quizás esta tranquilidad
política les venga dada porque, como en ningún caso, los políticos –con mando en
plaza-tienen a bien bajar a la calle y ver lo que ahí está pasando, seguramente
durante este mismo fin de semana estarán contentos -de haberse conocido-y a
partir de ahí y a deducir por lo que algunos de ellos publican en sus páginas
de Facebook, se dedican al patrocinio de fiestas, moros, cristianos y en
general a tareas que sin duda son de importancia superior a las de procurar que
los excluidos sociales mejoren, un poquito, sólo un poquito su status social.
2º.- También podría ser que, dado que
la ciudadanía nos estamos empezando a concienciar mínimamente, pero de forma
efectiva con estos asuntos. Quizás piensan que lo estamos haciendo como un
voluntariado surgido de sus enmoquetados despachos con vistas a la sierra.
De esta forma y practicando aquello
de que “ojos que no ven…….”, Se aplican al punto anterior y se dedican a
mejorar las conclusiones que su partido sin duda estará debatiendo sobre el
cambio climático y la política internacional.
3º.- Como última opción se me ocurre
que quizás tenemos unos políticos que aún que, evidentemente nos nos merecemos
puesto que salieron de los votos del conjunto de los ciudadanos.
Esta clase política ni está preparada,
ni pretende prepararse para afrontar los resultados sociales de una crisis pan
europea que a países como España nos está dejando simplemente -sin piel -.
Estamos sufriendo una clase política
que nunca pensó que tuviera nada más que hacer que ocupar sus sillones, cobrar
sueldos y recibir los halagos mutuos que unos a otros sin duda se propician.
Hace sólo unos días, se propuso a
todos y cada uno de los miembros del ayuntamiento de Altea, una moción
consensuada con todos aquellos que cada martes acuden a las reuniones de la
plataforma de afectados por la hipoteca de Altea.
En estas reuniones hay gente formada,
universitaria, con experiencia. Es decir, gente que además de estar afectada
por un problema que nuestros ediles parecen ignorar, tiene la preparación y la
experiencia para poder plantear algunas soluciones a este problema.
Bien, ninguno de los partidos ha
tenido a bien contestar a quien les requirió para que estuviesen una moción,
exclusivamente relacionada con los desahucios y con los excluidos sociales en
Altea.
Ninguno de esos partidos, entendió
que debía pedir explicaciones, aclaraciones o simplemente preguntar de qué
estábamos hablando.
Eso si, reunidos en pleno, con la
legalidad vigente -que no coincide con la ética vigente-se atrevieron a aprobar
una especie de mix que en nada se parece a la filosofía que inspiró la moción
original.
Eso sí, la aprobaron por consenso y
unanimidad.
Eso sí, crearon una comisión justo
con una composición contraria a lo que se pretendía en la moción.
Ediles de la incremento de Altea,
concejales del Partido Popular, Cioal, Partido Socialista y Bloq. Os diré que
hasta ahora nunca antes os habéis preocupado de la situación de los excluidos
sociales, que esta pseudo moción que habéis aprobado no sirve absolutamente
para nada más que el autobombo propio de unos políticos sin ideas y además con
una prepotencia que les da haberse presentado a unas elecciones, sin programa o
si acaso lo tenían sin ganas de pelear por hacerlo efectivo.
Os diré además que, como la opinión
de bastantes de los que participaron en la relación de la moción. Se ha
cumplido absolutamente su criterio. Aquel tan manido de que los políticos no
sirven para nada, y más concretamente, para nada que pretende resolver la
situación social de los ciudadanos.
Y además estos mismos compañeros dan
una razón que es simplemente aplastante. Y es que es completamente imposible
que alguien que no pertenece al mundo de lo real, entienda, plantee, reflexione
y al final proponga algo que pueda solucionar el día a día de una serie de
personas con las que no coexisten, aunque viven al parecer el mismo mundo.
Es decir también que hace tiempo que
no me -chupo el dedo-y por tanto tampoco tenía ninguna esperanza fundada en que
en la incremento de Altea, simplemente, hiciese una toma de postura que
favoreciese en algo a los excluidos sociales.
Es por ello y, para finalizar, que os
doy las gracias por nada. Que los la doy a todos; por ese consenso absurdo que
aprobó una tontería insulsa que ni compromete ni posiciona al ayuntamiento de
Altea en favor de quienes más lo necesita.
Por cierto que la falta de vergüenza
seguramente nos ha hecho pensar ni siquiera en el texto que habéis aprobado.
Decís que la Comisión estará formada
entre otros por políticos, técnicos y algún miembro de alguna asociación de
orden social, si así se creyera oportuno.
Con todos mis respetos que el cargo
que ocupa es me merece, no tanto las personas, os diré que me meto yo -vuestro
criterio de oportunidad -por el mismo sitio que os podéis meter vosotros la
Comisión.
Sólo espero que con esa decisión tan
abrumadora que de forma unitaria tienen los concejales de este incremento de
Altea, cuando os mandemos a una familia que esté en peligro exclusión social,
la tendréis -según vuestro criterio -de forma rápida efectiva y discreta.
Estad seguros que la prensa salga de
vuestras actuaciones. Está seguros que en cada manifestación que sin duda se
convocarán a lo largo del año, habrá un apartado de valoración de esta
supercomisión que nuestros políticos locales han tenido a bien fusilar, a
partir de una moción presentada por la plataforma de afectados por la hipoteca
de Altea.
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